¡Volvemos a la carga con una nueva review! En este caso se trata de un juego para dispositivos móviles creado por un grupo de canarios de los que ya hablamos cuando se publicó el análisis de FruityFish.
Casi un año más tarde, los chicos de Tormentes publican un nuevo juego bajo el nombre Coral: Una bruja diferente. En principio sólo está disponible para Windows Phone (aunque las adaptaciones de Android e iOS ya vienen en camino). A pesar de que estas versiones todavía no se encuentran disponibles para el público general, los desarrolladores nos han permitido acceder al grupo de betatesters. ¡Muchas gracias!
Los propios creadores del título lo definen como un shoot'em up poco común que combina el paso rápido y los disparos del género con elementos de RPG como los niveles de experiencia y el aprendizaje de nuevas habilidades.
Si andas un poco perdido con el término shoot'em up Wikipedia te lo aclara:
Shoot 'em up es un término anglosajón para definir un género de videojuegos en los que el jugador controla un personaje u objeto solitario, generalmente una nave espacial, un avión o algún otro vehículo, que dispara contra hordas de enemigos que van apareciendo en pantalla.
Como puedes observar, en el juego predomina una estética manga con unos fondos muy coloridos y llamativos. La protagonista es una bruja y responde al nombre de Coral.
No es una bruja cualquiera, Coral se ha apuntado al plan renove y ha cambiado su vieja escoba por una tabla de surfing que encaja mucho mejor con estos calores propios de la época veraniega en la que nos encontramos.
Nuestra misión será encontrar a la malvada bruja negra para saldar cuentas (aunque no hemos sido capaces de llegar tan lejos debido a que el juego es bastante complicado).
Unas pocas líneas más arriba ya te adelantábamos que la mecánica del juego mezcla características de shoot'em up con RPG. Si has visto el vídeo te habrás percatado de que la protagonista va avanzando de forma lineal por un escenario cargado de enemigos en movimiento.
Las dos acciones principales (y que ocuparán el 90% del tiempo de juego) se realizarán con los dos botones que se encuentran ubicados en la parte inferior de la pantalla. Con uno podremos hacer que Coral se eleve en su tabla de surf voladora y con el otro usaremos nuestros poderes de bruja para abrirnos paso por los niveles.
Hasta aquí nada fuera de lo normal: movimiento y disparos. La parte diferencial de este juego con respecto a otros es la mezcla con elementos más propios de un RPG. El título añade niveles de personaje, items que obtendremos al acabar con ciertos enemigos, hechizos que podremos craftear a partir de esos objetos, barras de vida y magia entre otras cosas.
El número de localizaciones presentes en el mapa no es muy extenso, pero teniendo en cuenta la dificultad del juego... vamos a tardar bastante en acabarlas todas. En total son 7: Bosque Encantado, Río Mágico, Campo de Calabazas, Pantano Místico, Pueblo Maldito, Cementerio y Castillo de la bruja. Aparte de estas siete localizaciones encontraremos un nivel inicial que se corresponde con el tutorial. ¡Muy útil!
Como cabría esperar, cada localización tiene una temática diferente. En cada una de ellas encontraremos enemigos que difieren de los que podemos encontrar en otras. Es por eso que muchas veces nos veremos obligados a revisitar lugares por los que ya hemos pasado. Así obtendremos los objetos que nos falten para crear algún hechizo.
Hay dos tipos de items en el juego: los objetos de crafteo y las pociones.
Los primeros son los que nos permitirán lanzar los hechizos que vayamos aprendiendo a medida que nuestra protagonista suba de nivel. Los enemigos los sueltan según un drop ratio establecido por el developer. Otra característica curiosa es la implementación de un algoritmo que en base a la hora del móvil (día o noche) es capaz de modificar la cantidad de enemigos y los objetos que estos dejan caer. Así que quizás, para poder elaborar algún conjuro, tendremos que jugar a una determinada hora.
Podemos ver los hechizos disponibles pasando las páginas del libro. Encontraremos hechizos ofensivos y hechizos pasivos que nos apoyen durante el combate. Pasarnos un nivel sin utilizar ningún hechizo es una tarea imposible, como mínimo habrá que emplear el hechizo de regeneración rápida de magia al final de cada nivel mientras luchamos contra el jefe.
Los desarrolladores han dado un salto de calidad notable con respecto a su anterior juego. La parte artística está mucho más elaborada y pulida (aunque quizás se echa en falta que las animaciones tengan transiciones de mayor fluidez).
El juego no es nada sencillo y se convierte en un auténtico desafío para aquellas personas a las que les gustan los retos. La nota negativa puede estar marcada por la obligación de repetir (tantas veces) los niveles ya superados para obtener (con algo de suerte) los recursos que necesitamos. Además, toda la experiencia e items obtenidos los perderemos si no somos capaces de completar el nivel en el que fueron logrados.
Al igual que cada localización se encuentra gráficamente contextualizada, sería interesante incluir música distinta para cada una de ellas.
Independientemente de estos apuntes, Coral: Una bruja diferente es un juego muy entretenido que te hará pasar horas tirándote de los pelos (en el buen sentido de la palabra).
Sin duda, Tormentes está mejorando poco a poco en lo que más les gusta hacer: crear videojuegos. Si siguen en esta línea seguramente veremos títulos muy interesantes en el futuro.
¡Felicitaciones a los desarrolladores! ¡Seguid así!