En Febrero de este mismo año, la Raspberry Pi Foundation anunció el inminente lanzamiento de la nueva versión de su mini ordenador de bajo coste: la Raspberry Pi 2.
Esta nueva revisión mejora en rendimiento y potencia a su predecesora sin que por ello se vea afectado el precio. Las placas anteriores se quedaban un poco cortas si les añadíamos demasiada carga de trabajo. En el momento en el que las destinábamos a mas de dos o tres tareas al mismo tiempo podíamos sufrir cuelgues.
Gracias a esta nueva actualización del hardware, no solo podremos llevar a cabo las mismas tareas que antes de una forma mucho más fluida sino que también veremos incrementado el abanico de posibilidades que esta pequeña placa nos ofrece.
La Raspberry Pi 2 ya se puede encontrar en tiendas físicas de electrónica en España. A continuación te mostramos un vídeo de lo que encontrarás al abrir la caja:
Como ya adelantábamos en el vídeo de arriba, el hardware ha sufrido una actualización bastante importante. Ahora contamos con un procesador ARMv7 de cuatro núcleos que funcionan con una frecuencia de 900MHz. Hemos pasado de una arquitectura ARMv6 a una ARMv7. Gracias a esta situación ahora Raspberry Pi es compatible con otros sistemas operativos más modernos y actualizados.
La memoria RAM también ha sido mejorada notablemente. Se ha duplicado su tamaño desde los 512 a los 1024 MBs (1GB), siendo esta una de las principales razones que nos imposibilitaban destinar la placa a más de dos o tres tareas simultáneas.
Desaparece también la salida independiente de vídeo RCA que podíamos encontrar en algunas de las versiones anteriores y que nos permitía conectarla a una televisión sin HDMI. Ahora necesitamos un cable especial que se conecta al mini jack de 3.5mm para sacar las tres componentes de video y audio. El modelo anterior más avanzado incluía 4 puertos USB que se han respetado en esta nueva revisión. Otras cosas que se han mantenido con respecto a su predecesora han sido el cambio de lector de tarjetas SD a microSD y los 40 pines de entrada/salida. Todo un acierto por parte de los miembros de Raspberry Pi Foundation.
La noticia más destacada en cuanto a sistemas operativos capaces de correr sobre Raspberry Pi 2 está encabezada por Ubuntu y Windows 10. Eso es lo que afirman sus creadores. De momento Windows 10 no ha salido todavía, pero Ubuntu sí que funciona (aunque tenemos que decir que no va todo lo bien que desearíamos).
Existe una versión minimalista del propio Ubuntu que ha sido diseñada especialmente para la Raspberry y que podemos descargar de su web oficial: Ubuntu Snappy. Esta versión no trae interfaz gráfica pero podemos instalarla nosotros mismos. La nota curiosa de la distribución radica en que se ha sustituido el famoso gestor de paquetes "apt-get" por un nuevo comando "snappy" de funcionalidad similar. La palabra snappy proviene de snap, que en inglés se utiliza para referirse al chasqueo de los dedos. ¿Quiere decir esto que es muy sencillo instalar cosas? Probablemente sí.
Al parecer no todos los entornos gráficos funcionan bien en Raspberry, tan solo se han podido obtener buenos resultados con el escritorio de Xubuntu y de Lubuntu. Próximamente publicaremos un tutorial sobre cómo instalar un gestor de escritorio en Raspberry Pi 2.
Por supuesto, los anteriores sistemas operativos que ya eran compatibles con la anterior Raspberry Pi siguen siéndolo para la nueva. Raspbian, OpenELEC, OSMC, Pidora, RISC OS... No hemos sacrificado nada de lo que eramos capaces de hacer con uno de estos cacharros.
Como podemos observar en la tabla superior, el avance más significativo se encuentra reflejado en el chipset compuesto por los 4 núcleos a 900Mhz y el GB de RAM.
El nuevo modelo de Raspberry Pi supone sin duda una mayor utilidad del dispositivo. Algo tan simple como cambiar el chipset para proporcionarnos un incremento de la memoria RAM y un rendimiento superior, hacen que las carencias de las versiones anteriores se vean solventadas en su gran mayoría.
Eso sí, debemos tener en cuenta que la Raspberry Pi, en nuestro contexto, no va a ser un dispositivo sustitutorio de los PCs de sobremesa. Si bien es cierto que nos será útil para destinarlo a otras tareas mucho más ligeras y/o fines educativos.
Hablamos de una placa compacta que funcionará perfectamente como servidor web, gestor de descargas, mediacenter... etc., y que gracias a ella podremos llevar a cabo nuestros proyectos personales sin tener que desembolsar una gran cantidad de dinero. Raspberry Pi Foundation ha tenido muy presentes todos los detalles que cojeaban un poco en el modelo predecesor y los ha arreglado con el cambio de chipset. Ahora, por ejemplo, ya no tendremos problemas al conectar discos duros externos si utilizamos un cargador de 2A.
Cada núcleo de la nueva CPU duplica el rendimiento de la anterior placa gracias al cambio de ARMv6 a ARMv7, lo que conlleva una renovación en el juego de instrucciones que maneja la unidad.
Un punto a su favor es el vínculo que se ha establecido entre Raspberry Pi Foundation y Microsoft: hacer que la placa sea compatible con el futuro Windows 10 (de manera gratuita) podría dar mucho que hablar. Me da la impresión de que este modelo proporcionará mucho juego en los próximos meses pues todavía hay pocos sistemas operativos optimizados para sacarle el máximo rendimiento a su hardware.
Raspberry Pi 2 ofrece todo lo que hemos comentado a un precio bastante contenido: 40-45€. Afortunadamente, el dispositivo cada vez está más extendido y es más fácil conseguirlo en tiendas de electrónica, evitando tener que comprarlo por internet con costes incrementados debido al envío y a las aduanas.
En definitiva, si quieres una pequeña placa para cacharrear o utilizarla para algunas tareas concretas como las que ya te hemos mencionado y que además consuma poco (4W), Raspberry Pi es la opción correcta. Si lo que quieres es un ordenador con unas prestaciones mínimas para el uso diario... quizás no sea la mejor opción (de momento).